La NFL ya tiene a las ciudades que van a pelear por ser la sede del Super Bowl LII, que se jugará en el 2018.
Las tres ciudades finalistas son Minneapolis, Indianapolis y New Orleans (nota personal: hubiera sido mucho más interesante si hubieran elegido una tercera ciudad con terminación en "apolis" en lugar de New Orleans).
New Orleans es la ciudad típica de las tres, y ha sido sede en varias ocasiones. De hecho el Super Bowl pasado fue ahí, y todos podrán recordar que tiene de todo como opción para el Super Bowl. Vamos, hasta problemas eléctricos.
Indianapolis fue sede hace dos años, y la impresión que la ciudad dejó fue bastante positiva. Eso seguramente ayudará a su candidatura.
En el caso de Minneapolis, ellos fueron sede del Super Bowl XXVI, y como están en proceso de construir un nuevo estadio para los Vikings obviamente pelearán por tener el Super Bowl para compensar un poco los gastos de construcción.
Las tres ciudades candidatas presentarán sus propuestas el próximo mayo en la junta de dueños.
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