El día de hoy murió Bud Adams, dueño de los Tennessee Titans. Y aunque podríamos decir muchas cosas sobre este legendario dueño, basta decir que con él se va parte de la historia de la liga, sobre todo la que refiere a la AFL y lo que eventualmente conocemos como la NFL moderna.
Adams fue, junto con Lamar Hunt, creador de la vieja AFL, una liga que nació con la idea de competir con la establecida NFL. Adams fundó a los Houston Oilers (ahora Tennessee Titans) mientras que Hunt fundó a los Dallas Texans (que ahora conocemos como los Kansas City Chiefs).
Los Oilers ganaron los dos primeros campeonatos de la AFL (1960 y 1961) para luego perder la final de 1962 con los Texans. Cuando vino la fusión de las dos ligas Hunt se llevó a sus Oilers a lo que ahora conocemos como la AFC, donde tuvieron temporadas bastante interesantes, sobre todo bajo el mando de Bum Philips (que murió la semana pasada).
A finales de los años 80 Adams se quejó abiertamente del estado del Astrodome, casa de los Oilers, tanto que amenazó con llevarse a su equipo a Jacksonville. Aunque se le añadieron asientos no lograron calmarlo, y para 1997 los Oilers dejaron Houston para irse a Tennessee, donde adoptaron el mote de Titans.
Esos Titans llegaron al Super Bowl en 1999, algo que no lograron nunca los Oilers. Y aunque perdieron con los Rams, la verdad es que fueron un equipo muy interesante bajo el mando de Jeff Fisher.
Y hoy este equipo se ha quedado sin su fundador. Y, por qué no decirlo, sin uno de los arquitectos de la NFL moderna.
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